viernes, 6 de junio de 2008

CARTA A LOS COMPAÑEROS

Ciudad Autónoma de Buenos Aires, 4 de junio de 2008

Queridos compañeros:
Utilizo este medio para que la comunicación sea mas rápida y generalizada que por teléfono, que es como habitualmente solemos hacer.

Es necesario que permanentemente compartamos tanto la información como las actividades que vamos realizando en el marco de este conflicto, como nuestra posición de acompañamiento a los distintos sectores de la sociedad en sus justos reclamos.

Lamentablemente la posición del Gobierno de no reconocer los problemas por los que, aún habiéndolo advertido desde hace mucho tiempo, estamos atravesando y la intransigencia irresponsable de su accionar están conformando un escenario que preocupa y angustia a cada vez más sectores de la sociedad.

Hoy ya no se trata de un conflicto sectorial por un reclamo determinado sino del agravamiento producido por el poder que ha demostrado no estar dispuesto a reconocer las consecuencias de sus decisiones.

Cada vez más sectores de la sociedad están agregando sus reclamos y es de una irracionalidad increíble la ausencia de reacción de un Gobierno que se empecina en dilapidar la legitimidad y el reconocimiento que hubiese logrado respondiendo con sensatez y coherencia en la práctica con aquel discurso discurso que apareció progresista, en algún momento, y preocupado por los intereses del pueblo.

A esto se suma el intento de ocultamiento de situaciones más graves aún, cuya resolución va a ser mucho más difícil de lograr en la medida que se sigan profundizando temas tales como la inflación y el aumento de la pobreza.

La inclusión de otros actores sin una explícita motivación en el escenario de este conflicto -como lo de los transportistas hoy cortando las rutas-, profundiza un velo de confusión y de falta de claridad que es absolutamente funcional a la estrategia del poder.

Esta situación, junto con las provocaciones e interpretaciones forzadas de este proceso que ya lleva 85 días, -entre ellas el amedrentamiento a través de citaciones judiciales poco claras a productores y dirigentes de la oposición y el control previo que exige el ministro de Justicia de avisarle sobre el accionar de la Justicia- evidentemente están generando condiciones que apuntan a enrarecer el clima reinante.

Por todo esto es necesario estar alertas y advertidos sobre la responsabilidad que le cabe a quienes generan estas condiciones a través de medidas intimidatorias y de los funcionarios y dirigentes que se prestan a tal fin.

Es por esto que tenemos que demostrar nuestra posición frente a la sociedad, con la seguridad que nos da la coherencia de nuestras propuestas. Nuestra presencia, acompañando y apoyando, debe destacarse siempre por la claridad en el marco de la no violencia, sin ningún tipo de respuesta a las provocaciones divisionistas, preservando la integridad de las personas sin echar mano a ninguna modalidad violenta.

En momentos como éste es probable que muchos sean los que intenten, de manera oportunista, sacar réditos espurios, por eso nuestra presencia tiene que significar un aporte a la transparencia de las posiciones, a la verdad con firmeza, sensatez y serenidad, sin hacernos eco de provocaciones.

Compañeros, en estos momentos tan difíciles ratifiquemos en la práctica nuestro esfuerzo y compromiso con la verdad y la justicia en el camino de construcción de un país para todos.

Junta Nacional-ARI Elsa Quiroz, secretaria general

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